viernes, octubre 27, 2006

"EL CHIICO DE LOS MIL Y UN AMORES"

Caminaba, a paso lento pero seguro, caminaba. Lo hacía una y otra vez. Como queriendo evitar lo inevitable, después de todo, todas ellas caminaban también, y la vereda no de su exclusividad. Era ilógico que no se topasen -por último en el paradero de la micro o en el andén del metro-.

Aquél día jueves caminó como siempre, cogió su morral, su reproductor de música, sus intereses perdidos y, cansado, hacía lo imposible por llegar temprano a su casa.

Mientras vagaba por la vereda derecha de la avenida vio a
Alejandra, según él, su mujer. Sin ganas ni de asentirle con la cabeza, como pretendiendo saludarle, subió el volumen de su reproductor y apuró la marcha. Pasó por su lado y siguió su rumbo. Creo que le hablaron, pero él ni se inmutó, sonrojado hasta las entrañas continuó su retorno. Qué papelón el de ese instante, aquella mujer -a la cual le habría jurado amor eterno si ella le hubiese dicho alguna vez un "te quiero"- ahora sólo le producía vergüenza, no por ella, sino por la fragilidad con la que se había entregado a sus encantos.

Una cuadra más adelante se topó frente a frente con
Trinidad, según él, su chica. A la cual le habría entregado su corazón y alma si ella le hubiese dicho alguna vez: "hola". Conciente del enamoramiento del cual había sido víctima, pero arrepentido otra vez por su inestabilidad afectiva, Trinidad, aún le atemorizaba, no quería mostrar señales de que le acomplejaba que ella pensara que aún él y sus cariños le pertenecían. Cambió la dirección de su mirada e hizo como que no estaba -¿ante la vergüenza más vale quedar como roto no?-.

Ruborizado y nervioso comenzó a reír por las coincidencias que aquel día jueves le había otorgado. Para ya no toparse con nadie, decidió tomar un camino aledaño a esa avenida... Nada de eso, todo había sido para peor.

Justo en la esquina que dobló para tomar la micro se encontró con ella,
Sofía, según él, un amor de "aquellos", -la joyita de su vida- el amor de sus amores.
Sin parecer un gigoló o un "Don Juan", él estaba seguro de que un amor como el que sintió por Sofía, jamás nunca lo iba a volver a sentir. Sin escapatoria ni posibilidades -pero sí con muchas ideas difusas-, no le quedó más remedio que saludarla.

- ¿Cómo estás?, tantas lunas sin vernos - dijo
Sofía
Él por su parte, inmovilizado con la imagen de aquella musa, no supo que hacer ni decir y agregó:
- “Bien ¿y tú?-que bueno” - y sin dejar un tiempo para la respuesta de su amor continúo su retorno a casa. La música cada vez subía de volumen, y la extrañes del muchacho por la seguidilla de coincidencias crecía a mil por segundo.

Llegó al paradero. Todo se veía bien, nada por aquí; nada por allá, hizo parar a la primera micro que pasó por la Alameda.
¡MALA SUERTE!, en ella iba
Angélica. Según él, la mujer que jamás iba a olvidar, la que lo llenó de sueños y proyecciones, la mujer que contorneaba su vida y delimitaba su mundo. Pasmado ante tal aberración del destino bajó de la micro y se fue caminando a su casa. Por las calles más recónditas se escabulló de aquel día jueves, de aquella jornada infernal y jocosa a la vez. Tanta coincidencia le advertía que su fragilidad emocional no era buena consejera, demasiados amores en tan poco tiempo era -a estas alturas y a vista de los hechos- un chiste.

Aceptándolo como tal, se desvaneció por las calles húmedas de la capital, esas con suelo adoquinado y paredes a medio pintar. Riendo y rememorando las historias con sus amores -todos importantes-, subió el volumen de su reproductor y caminó por los senderos apaciguados y serenos. Sin correr la mirada y con temor de encontrarse con otro amor más, cantó la balada que le había dedicado a todas sus musas, y caminó.

3 comentarios:

La Mala Madre dijo...

que tal si te digo.. que cada individuo posee un ramillete de hermosas flores... de petalos rosagantes y pistilos destellantes?

porque avergonzarse.. del caminar... porque pensar tan solo que sonrrojarse.. está mal?

quizas cuando entregas todo.. y muestras lo frajil que eres.. logras distinguirte entre los demás.... porque crees que es demaciado decir que eres tan igual o quizas mas sentimental que una dama.. que solo sueña con un amor utópico?

vivee... al maximo.. vive a concho.. cada paso y cada flor que cortas con la emoción de ke sea la unica tan solo te demuestra cuan humano eres.. cuan fresco te sientes.. !
la soledad es aspera.. pero el recuerdo de relaciones pasadas es un licor de buena claridad.. que te arroja al frenesi del zigzagueo.. de cansiones.. y olores.. que te recuerdan cuan placido es sentirte querido...!


mi utópico amigo.. jajaj creo que jamás olvidare esa palabra dicha por ti... cuando creiste que este mundo aun era bueno.. cuando creiste que las luchas por los derechos eran solo movidas por el deseo del cambio... mi ingenuo amigo.. me agrada que aun piense lindo!

espero que por cada huella.. hecha en tu memoria... de la mas dificil forma... logres recojer.. un poco de esta maldita ciudad... a la que no pertenencen tus pensamientos.. tan transparentes.. o quizas sigas el camino de todos aquellos que viven hoy en esta maldita selva de cemento... y logres ponerte a la altura de esos narzicista.. que aun siguen al mando..!!


eres tan fragil de sentimientos que te haces cada día mejor persona.. no lo cambies al pasar por caminos repletos de piedras que te hacen tambalear... solo se tu y ve camina porque incluso tengo fé de que algún día podrás volar.


besos compañero mio!



shiaaaaaaaaaaaaaaaaaa me fui en la terrible de volaaaa.. na ke errrr!! jajajaj


besosososo amigo.

Anónimo dijo...

Espero el chico de los mil y un amores no haya andado ese Jueves con sus gastadas converse y luego de tamaña caminata, subiendo el volumen del reporductor a cada rato, sus oidos hayan tenido tiempo para descansar. Espero ese amigo mio, haya pensado bien las cosas ese Jueves, se haya reido un buen rato de él y luego, con un puchito en mano, su gorrito con orejeras y chaqueta de cuero haya vivido la vida ese Jueves.
Oye, que envidiable Jueves tuvo nuestro amigo, espero algún día recorra esa calle, tome esa micro y luego por desconicidas calles llegue a mi Dpto. Con esa risa sola y una memorable canción en los oidos, con toda la vida pasando en el reproductor.
Muchos besos y parece que mi blog no funcionó más, help mee!

Felipe Franzani Feltes dijo...

Maldito seas! Me haces ver las cosas desde lejos ¡Desde aquí todo se ve tan pequeño!
Cada promesa, cada ilusión, cada amor es siempre el mejor que se ha tenido... ¿¿por qué nos engañamos pensando que durarán para siempre?? Pero al verlos todos agrupados, como tú lo pones, resulta bastante absurdo, y además untado de mentiras.
Te quiero mi amigo, nuestra amistad nunca va a morir... ¡qué mentira! O por lo menos qué ceguera, nunca sabemos que pasará en las relaciones humanas. Quizás dure para siempre o quizás no, y es inevitable, no se puede controlar el interés que se tiene en mantener una relación, como no puedes controlar tampoco tu amor por una mujer...
Por otro lado, la calidad de Impredecible es lo que da el valor a las relaciones... ¿o será solo por el miedo a la pérdida que llenamos todo de ilusiones? Algo para reflexionar.
Adios mi amigo, y aunque no puedo decir que seremos amigos para siempre, ¡sí puedo mantener viva esa esperanza!

PD: ¿Vivir en el presente con las respectivas anteojeras o ver la escena en su totalidad pero a la distancia? Siento que es la historia de mi vida... seguramente me equivoco.